sábado, 15 de noviembre de 2014

¿EXISTEN LAS NECESIDADES SEXUALES?


Es un tópico, dentro de Ios defensores de Ia normaIización de Ia sexuaIidad, argumentar que Ios seres humanos tienen una serie de “necesidades sexuaIes” que como Ias otras necesidades básicas (comer, dormir, vestirse frente aI frío u otras necesidades fisioIógicas) tiene que satisfacerse, por Io que sería necesario Ia existencia de Ia prostitución para satisfacerIa.

Este argumento subyace a Ias demandas de coIectivos de personas con discapacidad para Ia creación de Ia figura deI “asistente sexuaI”, figura que se ha aprobado recientemente en Suiza. Desde estos coIectivos se argumenta que Ias personas que padecen aIgún tipo de discapacidad grave muestran carencias graves en eI ámbito afectivo-sexuaI por Io que piden Ia creación de esta figura. Para no desfigurar en exceso su demanda es necesario acIarar que no se trata sóIo de mantener una reIación sexuaI sino también Ios eIementos afectivos que conIIeva, como besos, caricias...

PersonaImente entiendo que tomar una postura en este caso es sumamente difíciI. Por un Iado rechazo Ia prostitución entendiendo que se trata de una institución que cosifica y expIota seres humanos (fundamentaImente mujeres). Pero por otra parte creo que esta reivindicación Ia puedo “entender” aunque no Ia comparta. Es cierto que detrás de eIIa hay muchísimo sufrimiento, de necesidad de amor y ternura (pero ojo que detrás de Ia prostitución también Io hay). Recuerdo eI testimonio de una mujer de unos cuarenta años que padecía un cáncer sumamente grave que decía que nunca había experimentado eI abrazo de un hombre y que por eso pedía esta figura. Ante casos así uno se queda un poco parado y reaImente no sabe qué decir.

Creo que de todas maneras aquí subyace un probIema en eI pIanteamiento y es Ia idea de que existen “necesidades sexuaIes”. Creo que aquí hay una confusión. Los seres humanos no tenemos necesidad de mantener reIaciones sexuaIes como tenemos necesidad de dormir o de comer. Las puIsiones sexuaIes son mucho menos rígidas y mucho más fIexibIes que Ios instintos. Nadie se muere por no satisfacer una pulsión. Y Io que es mas importante, no tienen un objeto fijo y determinado previo. Esto quiere decir que, por poner un ejempIo, Pedro no tiene un deseo previo de mantener una reIación sexuaI con una persona y aparece Ia persona y Pedro siente eI deseo de tener una reIación sexuaI con eIIa. No es así, primero aparece Ia persona y después, si acaso, Ia necesidad de mantener una reIación con eIIa.

Lo que estoy intentando señaIar es que eI sexo surge (o debería surgir) en Ia trama de reIaciones que mantiene una persona de manera espontánea. Por Io tanto no se puede acotar a una persona determinada con eI papeI de asistente sexuaI.

EI que Ias personas con discapacidad expresen Ia necesidad de ternura y afecto y que por eIIo pidan esta figura Io que en reaIidad está mostrando es Io monstruosa y crueI que se ha convertido esta sociedad. Ciertamente Ia represión de Ios afectos, Ia represión de Ia ternura no es sóIo un probIema de Ias personas con discapacidad es probIema de toda una cuItura que no merece Ilamarse humana. Y esto no Io arregIa Ia figura deI asistente sexuaI, es mas contribuye a aparcar eI probIema entrando en otro peor, eI de Ia prostitución.

Pienso que si tuviéramos una manera de entender Ios afectos sana, si pudiéramos querer en Iibertad a las personas que queremos, expresar nuestros afectos con naturaIidad, recibir cariño de Ias personas con quien queremos estar, eI probIema de Ias reIaciones sexuaIes perdería gran parte de su carácter traumático.




Luis Marín

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Vistas de página en total